El sistema integumentario es la cubierta protectora de un organismo y sus apéndices. Para la gente, este sistema está hecho de piel, que cuenta con varias capas y apéndices. El sistema integumentario es el más extenso de un animal ya que lo recubre por completo, tanto externamente, como numerosas cavidades internas.
Funciones:
Estructura del Sistema:
Funciones:
- Barrera de protección frente el medio externo, es la primera barrera inmunológica.
- Interviene en evitar la desecación. En esto están relacionados los cambios de muda y pelamen. Cambia el grosor entre invierno y verano.
- Movilidad: permite el movimiento, como en algunas larvas de invertebrados, que disponen de bandas de cilios y pueden moverse en el agua.
- Mimetismo: permite camuflarse, como en el caso del insecto palo.
- Nutrición: importante en parásitos, como trematodos y cestodos, los cuales absorben nutrientes a través del tegumento.
- Respiración: la respiración cutánea se da en los anfibios; en el caso de los parásitos anteriormente citados la absorción de nutrientes incluye oxígeno.
- Excreción: es el caso del sudor, una orina muy diluida que además de eliminar sustancias nocivas también permite reducir la temperatura corporal.
- Papel diagnóstico: observando su aspecto se pueden detectar enfermedades, tanto propias de la piel (lepra, sarna, etc) como de otras partes del cuerpo (ver sección Dermatología). Además, es un indicador de la edad del individuo.
- Importancia en el cortejo: mediante la coloración del tegumento, y de sus faneras (como plumas y pelo) se reconocen individuos del sexo opuesto mediante dimorfismo sexual. También sirven para la exclusión de individuos de otras especies distintas en algunos casos.
Estructura del Sistema:
- Cemento: para que con el roce no se rompa.
- Cristalina (de cera): confiere impermeabilidad (menos expuesto a la desecación).
- Cuticulina: lipoproteína tonificada por quinonas.
- Proteínas.